Uno de los productos más típicos del Bierzo, el Botillo es una especie de embutido creado en con los recortes de algunas piezas de carne provenientes del credo; su elaboración data de muchas décadas atrás, desde épocas medievales y su receta ha pasado de generación en generación, manteniendo el proceso tradicional desde su creación.

Es un producto que suele consumirse mayormente en el invierno y su presencia en las distintas reuniones de celebración es indispensable; su composición es básicamente carne de cerdo trozada, en distintas proporciones en cuanto a los cortes tomados para su elaboración. El Botillo tiene ciertos ingredientes esenciales para que su forma, sabor y estructura, se mantengan idénticos al original, es por esto por lo que, si se desea realizar un botillo de la manera tradicional, hay que respetar la receta al pie de la letra, para que su consistencia, aroma y sabor sea el correcto.

Otro factor muy importante que se debe respetar son las proporciones que componen el botillo, de esta manera si deseamos elaborar un botillo, debemos saber que entre un sesenta y cinco y un noventa por ciento del producto final está compuesto por costillas de cerdo trozadas, y el porcentaje restante por rabo de cerdo. Con estos dos cortes aseguramos la obtención de un botillo bien hecho, a pesar de esto, existen algunas personas que optan para realizar una mezcla de sabores que potencie el sabor natural del botillo, así es como agregan otros cortes de carne, entre los más usados podemos encontrar, paleta, espinazo y carrillera; la proporción es un factor fundamental para un buen resultado, por esto es por lo que cualquier agregado no puede superar en porcentaje un veinte por ciento de la preparación.

Claro está que a los trozos de carne se les deberá agregar, los distintos condimentos, sazones naturales y especias en general, también se debe mezclar ajo con la carne. Está unión de sabores se unirá de manera tal de que luego de que el proceso de elaboración culmine, se obtendrá como resultado un chacinado sabroso, con un sinfín de sabores y aromas, que lo transforman en una materia prima ideal para consumir en los ratos libres o en fiestas tradicionales.

Un buen consejo es disfrutar de este manjar en algunos de distintos restaurantes típicos, que nos ofrecerán un maravilloso ambiente, junto a los paisajes de los distintos poblados de León, sus calles que parecen ser de otra época, y en las cuales se encierran cientos de historias de los antiguos pobladores, además de los kilómetros de verde en los que se puede disfrutar del paisaje serrano que acompaña.

La elaboración del botillo cuenta con ciertos pasos bien detallados, los cuales han sido aplicados desde épocas de antaño y que nos asegurarán un producto de excelencia; los pasos que debemos seguir con detalles son:

  • Elección de los productos que trozaremos para formar la mezcla de carne: saber elegir los insumos que formaran parte de nuestra preparación es fundamental, entendiendo esto debemos saber que algunos cortes son los que debemos usar para una elaboración correcta y siguiendo la receta tradicional, podremos elegir entre (Lengua, costillas, rabo, paleta, carrillera y espinazo). En todo el proceso no debemos olvidar la utilización de carne que este fresca.
  • Condimentado de la carne: Tan importante como la elección del tipo de carne y los complementos para el troceado, es el condimento que debemos agregar a la mezcla, debemos comprender que en este paso radica una parte importante de la cocción, ya que si lo hacemos bien la carne tendrá mejor sabor y aroma, logrando expulsar su jugos y resaltando lo mejor en cuanto sabor que tiene para ofrecer el botillo.
  • Ahumado: Luego de que tenemos la tripa rellena y atada solo nos queda pasar por la etapa de ahumar la carne para que selle los distintos sabores y sume ese sabor especial que ofrece el ahumado.
  • Secado: El secado es una etapa muy simple de la elaboración del botillo, luego de que todos los anteriores pasos fueron cumplidos, solo resta esperar nueves días, para que los tiempos hagan su magia y el botillo tome una consistencia necesaria para que se mantenga unido.